Como se darán cuenta, de escritor no tengo absolutamente nada. Simplemente dejé volar mi imaginación recostado bajo un árbol de la isla Huemul en mi primera y única visita.
A medida que las imágenes aparecían en mí, viendo las construcciones de laboratorios efectuadas en el pasado, las cuales hasta la actualidad carecen de explicación lógica, pensaba que alguien debería compartir ese oscuro juego de la mente.
Lo que más me aterra es que a medida que me adentraba en esta historia, la realidad histórica superaba a la ficción de mi limitada imaginación, dejando para mi conciencia la puerta abierta para mostrar en papel lo que pudo haber sucedido, o lo que es peor podría estar sucediendo en este instante.
Lejos está en mí herir o reabrir heridas de personas afectadas o bien sufridas por los acontecimientos del pasado utilizados para engranar esta modesta historia.
Genre: FICTION / PoliticalHasta el momento se realizaron 7 tiradas en papel las cuales se agotaron. Finalmente me decidí a intentar la via digital y aquí estoy, intentando nuevas posibilidades. Espero que este camino me lleve a más producción.
gente inclusive después de varios años.
Mientras tanto, Simón, llegaba al Centro Atómico. En este lugar ya no se le exigían credenciales para su ingreso debido a la cantidad de horas que pasaba allí. Incluso muchas más que en su propia casa. Al llegar, saludaba al guardia levantando el brazo a la distancia, y el agente de seguridad, respondía de la misma forma sin registrar su ingreso o salida. Una vez en el interior del complejo se dirigió a un área restringida de un edificio recién terminado con donaciones privadas recientemente incorporadas al proyecto que allí se desarrollaba.
Tras una pesada puerta se ingresaba a un laboratorio en un gran sótano a diez metros de profundidad. El mismo contaba con una compuerta que tenía comunicación directa al lago. Allí se efectuaban pruebas de alternativas energéticas, térmicas y eólicas. El personal afectado se limitaba a cinco personas introvertidas y sumamente concentradas en sus ensayos. Instrumentos de medición de origen alemán, cables, microscopios electrónicos y cristales de blindaje dejaban ver que se trataba de instrumental nuevo recién llegado. Un saludo formal de manos dio continuidad a sus tareas. En el interior, el hermetismo, el silencio y la disciplina eran notables. Lo que más les interesaba al parecer era llegar al frío absoluto en el menor tiempo posible. Esto les permitiría evaluar el comportamiento de los átomos en estados extremos.