¿Cómo fue que Jesús de Nazaret, un predicador judío, terminó siendo llamado “Hijo de Dios” y adorado por millones de creyentes? Este controvertido pero reflexivo libro muestra cómo, a lo largo de tres siglos, la figura de Jesús fue gradualmente elevada hasta volverla, en el Concilio de Nicea del 325 d. C., igual a Dios. Sin embargo, en el camino hubo de pasar por muchas disputas y divisiones al interior del naciente cristianismo.
Esta obra intenta responder preguntas controvertidas sobre los orígenes del cristianismo. ¿Quién fue originalmente Jesús: un maestro de la Ley, un filósofo cínico, un proto-feminista, un zelota, un profeta apocalíptico? ¿Qué tan confiables son los Evangelios para conocerle históricamente? ¿Cuál fue el contexto histórico y religioso donde surge la adoración a Jesús? ¿Se consideró Jesús realmente Dios durante su vida? ¿Cuáles fueron las razones históricas de su crucifixión? ¿Cómo explicar las apariciones de Jesús resucitado a los discípulos? ¿Por qué hubo tantas formas de concebir a Jesús en los dos siglos posteriores a su muerte: docetistas, gnósticos, separacionistas, marcionistas, arrianistas? ¿Qué enseñó originalmente Jesús? ¿Conservan los Evangelios pistas sobre la gradual divinización de Jesús? ¿Qué consecuencias se generaron tras las declaraciones del Concilio de Nicea?
Proponiendo con sus hallazgos la base de un debate más objetivo hacia los orígenes del cristianismo, “De carpintero a Dios” nos ofrece aspectos hasta ahora desconocidos de la figura de Jesús de Nazaret que nos harán reflexionar mejor nuestras creencias. Como señala el autor: “Será propio de la fe que busca certezas avanzar a través de las siguientes páginas”.
Como este libro va dirigido a un gran público, he decidido por esta ocasión no abrumar al lector con un aparato de notas explicativas. Quien desee profundizar en los temas tratados, se le facilita la bibliografía respectiva, que como se verá, es altamente académica y confiable. Pese a ser una reconstrucción teórica, la hipótesis sostenida en este libro se sustenta en respaldos de autoridad y erudición que abarcan un periodo de más de cien años de continuidad. Sin embargo, también quiero aclarar que no se pretende con este ejercicio intelectual adoptar o crear una actitud acusadora o descreída hacia la religión: considero que todo creyente debe darse tan sólo la oportunidad de conocer los orígenes históricos de su convicción religiosa; de hecho, para que aspire a esta categoría, debe sustentar su creencia desde la base misma, pues finalmente todo credo religioso es un fenómeno social con un punto de partida cierto en el tiempo. Atreverse a conocer los posibles orígenes de un credo brinda una mayor convicción al transmitirlo y la posibilidad de enfrentar objeciones históricas en naturales debates teológicos o de los orígenes del cristianismo. En el mundo de la argumentación, esto es preparar las posibles excepciones sobre lo que deseamos opinar y atajar las posibles réplicas del oponente en un debate.
Escribir una obra como esta requirió atrevimiento. Leerla no requerirá menos. Será propio de la fe que busca certezas avanzar a través de las siguientes páginas.
Language | Status |
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French
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Already translated.
Translated by Guillermo Cabello Garcia
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Italian
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Translation in progress.
Translated by Lidia Pedìo
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Portuguese
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Already translated.
Translated by Rosana Aralde de Almeida
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