Martín toma una decisión: a partir de ahora, no va a lavarse los dientes.
Y así lo hace hasta que una noche, al caérsele un diente, un animal muy especial acude a visitarlo: ¡es el Ratoncito Pérez!
El roedor lo nombra ayudante de honor durante una noche, así que Martín tiene la oportunidad de acompañarlo en su mágica jornada laboral.
Junto al Ratoncito Pérez, Martín visitará a muchos niños, niñas, hombres y mujeres y comprobará la importancia de tener una buena higiene bucal.
Un libro infantil recomendado para niños y niñas a partir de 6-7 años.
La finalidad de este libro infantil es reivindicar la importancia de cepillarse los dientes con regularidad como algo determinante en el bienestar general y en la prevención de enfermedades.
¡No quiero lavarme los dientes! es un libro de primeros aprendizajes.
Es el quinto libro de la colección “¡No quiero…!”.
Otros títulos de esta colección infantil son:
Clasificación en los más vendidos de Amazon: n.° 11.161 de Pago en Tienda Kindle (Ver el Top 100 de pago en Tienda Kindle)
n.° 28 en Libros de relatos breves para jóvenes
n.° 100 en eBooks acción y aventuras para jóvenes
n.° 9 en Historias cortas para jóvenes
Martín no va a lavarse los dientes nunca más.
Está decidido.
Lavarse los dientes es una tontería, y además supone mucho trabajo.
Martín sabe que, si uno no se lava los dientes, se pican. Pero ¿y qué?
¿Qué más da?
Martín entiende que una persona mayor se preocupe por lavarse los dientes, pero él no tiene por qué preocuparse. Si a una persona mayor se le pican los dientes, se le caen y se queda sin dientes.
Pero Martín tiene siete años, así que, en caso de que se le pique algún diente y se le caiga, le saldrá otro nuevo.
Así que… ¿por qué tiene que lavarse los dientes?
Además, cuando se lava los dientes, se le va el sabor de la comida.
Si Martín come una tarta de chocolate, le gusta mantener el sabor del chocolate en su boca todo el tiempo posible. Pero si se lava los dientes, el sabor del chocolate desaparece. Y en su lugar aparece el sabor a menta de la pasta de dientes.
Así pues, ¿por qué tiene que lavarse los dientes?
Martín lleva ya dos días sin lavarse los dientes y no podría estar más orgulloso de sí mismo.
Ahora cuando se va a la cama, puede seguir degustando el sabor de la cena.
Hoy ha cenado un sándwich de jamón york y queso y, de postre, unas natillas.
Y gracias a su estrategia, todavía conserva el delicioso sabor del sándwich y las natillas. El truco consiste en guardar diminutos trocitos de jamón york entre sus dientes y en restregarse bien la lengua contra los dientes cuando come natillas. Así el sabor durará toda la noche.
Language | Status |
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French
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Already translated.
Translated by Petya Simeonova
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Italian
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Already translated.
Translated by Anna Camagni
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Author review: Fantástica traducción y colaboración. |